Iridología

Los ojos son los órganos más expresivos de nuestro cuerpo, cuando nos comunicamos utilizamos nuestros ojos y podemos adivinar el estado de ánimo de de otras personas a través de la interpretación de sus miradas, a veces, mientras que los labios dicen "si"... los ojos dicen "no" y viceversa.

La ciencia de la iridología se basa en el análisis del color y de las delicadas estructuras del iris y no tiene relación alguna ni con la oftalmología (rama de la medicina alopática que estudia las enfermedades de los ojos) ni con la optometría que corrige los errores refractarios utilizando lentes ópticas.

El iris es un mundo de diminutos detalles en sí mismo y está capacitado para almacenar información, de modo que en la iridología, el iris, simplemente, se convierte en el vehículo transmisor entre el cuerpo y el iridólogo para que éste último pueda reconocer el estado de los órganos mediante las señales que éstos proyectan en él.

En consecuencia, los objetivos de mi trabajo son los siguientes:

a) Conocer más la ciencia de la iridiología y su aplicación en la salud de las personas.

b) Analizar la relación existente entre el color de los ojos y las enfermedades más comunes asociadas a ellos.

Creo, que la iridiología es una ciencia real y que permite conocer algunos aspectos de la salud de las personas. Posiblemente, esta relación dependa también de la edad de las mismas.

 

La iridiología es una reciente ciencia experimental que se basa en al observación del iris con la ayuda de una lupa y de una luz incorporada. No es una medicina y no cura enfermedades, pero puede prevenirlas.

Al igual que las huellas dactilares, cada persona tiene un diseño del iris único y en éste se encuentra toda la información de nuestro estado neurológico, químico, orgánico y estructural.

Así, un correcto análisis del iris puede revelar debilidades, congestiones, irritaciones y enfermedades; a partir de las anomalías cromáticas, las manchas, las cavidades y los relieves que cada iris presenta.

El diagnóstico es eficaz e inofensivo, por lo que es una buena alternativa a la hora de detectar enfermedades en personas aprensivas a los análisis médicos (en especial, los de sangre), por ejemplo, los niños.